Además de la creación diaria de ropa para los niños, el equipo iELM está en constante búsqueda y experimentación de diversas facetas de la vida diaria. Hoy le proponemos una pequeña incursión en el mundo culinario con dos recetas nuevas probadas por nosotros, muy fáciles de hacer y beneficiosas tanto para los niños como para los adultos.
La calabaza se declara anualmente la estrella de la estación en la categoría de hortalizas muy sabrosas y saludables. Las comidas a base de calabaza son no sólo deliciosas, sino que también ayudan a equilibrar el cuerpo a través de la aportación de vitamina A, provitamina A betacaroteno y vitamina C.
Los beneficios de esta super-hortaliza incluyen: la mejora de la visión y de la calidad de la piel, la estimulación de la pérdida de peso (fuente de fibra), la protección del sistema cardiaco mediante la reducción de colesterol LDL, el fortalecimiento del sistema inmune, la reducción del dolor muscular después del ejercicio y una recuperación más rápida, un mejor estado de ánimo (el antioxidante triptófano contenido por la calabaza está involucrado en la producción de serotonina, la hormona de la felicidad).
Recogidas en secreto de iELM y puestas por escrito, le damos la bienvenida hoy con dos recetas sencillas, buenas y nutritivas: sopa crema de calabaza y calabaza al horno con miel.
Se concederán 30 minutos para la preparación de la deliciosa sopa crema de calabaza. Los ingredientes que necesitan son: 800 gr de calabaza, sal, pimienta, 2 cucharadas de aceite de oliva, 1 pimiento verde, 1 chile, 1 apio, 2 cebollas blancas y 2-3 dientes de ajo.
Limpiamos la calabaza y luego lo cortamos en cubos; se hierve en agua con sal, añadiendo también unas gotas de aceite de oliva. Ajuste el calor y deje que hierva. A continuación, se limpian todas las demás vegetales mencionadas (apio, ajo, cebolla, pimiento) y se hierven con calabaza. Después de un tiempo, comprobamos si las verduras están cocidas; si es así, las sacamos en un colador y guardamos la calabaza y el apio para hacerlos puré utilizando la batidora. Obtenemos un puré de calabaza, que se mezcla con el jugo en que hirvió. Añadimos el aceite de oliva, sal y pimienta al gusto y dejamos la sopa hervir de nuevo.
¡La sopa crema de calabaza está lista! Se puede servir con pan fresco, tostones, se puede decorar con copos picantes de ají o con semillas de calabaza, según sus preferencias.
La calabaza al horno se prepara muy rápidamente. Calentaremos muy bien el horno y cubriremos una bandeja con papel de hornear. La calabaza se corta rodajas o cubos, las semillas se sacan, y luego se coloca en la bandeja; por encima se espolvorea un poco de aceite de oliva, una cucharadita de nuez moscada y sal gruesa. Se deja en el horno por aproximadamente 20 minutos. ¡El aroma de la calabaza al horno sorprenderá cada rincón de la casa! Para el postre más saludable, sirva la calabaza al horno con miel, canela, nueces o anacardo, al gusto.
¡Qué disfrute del gran día de las calabazas!
